La Biblioteca Pública Manuel Zapata Olivella El Tintal se consolida como un lugar de encuentro para la comunidad
El pasado 29 de junio celebramos el aniversario 22 de la Biblioteca Pública Manuel Zapata Olivella El Tintal con el conversatorio ‘La biblioteca dialoga con el territorio’ con la participación de usuarios de BibloRed, así como Fabio Vinasco, director de la facultad de arquitectura de la Universidad Uniagustiniana; Daniel Bermúdez Samper, arquitecto de la Biblioteca Pública Manuel Zapata Olivella – El Tintal; y Rafael Tamayo, director de la Dirección de Lectura y Bibliotecas de la Secretaría de Cultura.
La Biblioteca Pública El Tintal fue inaugurada el 29 de junio de 2001 en la localidad de Kennedy, al suroccidente de la ciudad, sobre la avenida Ciudad de Cali con calle 6c, una zona rodeada por barrios populares y tres humedales.
El predio albergaba una planta de transferencias de basuras que estaba en desuso y cuya estructura sirvió de base para la construcción de la biblioteca, gracias al innovador diseño arquitectónico de Daniel Bermúdez.
Durante el conversatorio Bermúdez, el arquitecto que tuvo a cargo el proyecto de transformar una planta de transferencia de basura en una biblioteca, comentó la importancia de las bibliotecas en la transformación social y el impacto de la zona en el desarrollo económico, social y cultural.
“Lo más importante de esta biblioteca es la capacidad que ha tenido de reunir a una comunidad que ha crecido. También la biblioteca y las zonas verdes han permitido que las nuevas construcciones, avenidas y humedales se conformen de manera coherente y organizada bajo una significación colectiva para la vida de la ciudad”, indicó Bermúdez.
En el territorio ha habido una transformación positiva a lo largo de los último 22 años, ejemplo para otras localidades de la ciudad, anteriormente en el lugar de la Biblioteca Pública Manuel Zapata Olivella – El Tintal había fincas y una planta de transferencia de basuras, es un cambio bastante notable, ya que hoy representa un espacio de encuentro para la comunidad en donde los usuarios se reúnen en un ambiente diseñado para la lectura, con una arquitectura formidable que reúne tres criterios fundamentales; una excelente iluminación gracias a los “bolsillos de luz” del segundo piso, los cuales sobresalen en las fachadas que dan claridad a la sala de lectura y evitan el deslumbramiento que produce la luz directa, aislamiento de ruidos exteriores y amplios espacios y salas de lectura para todas las edades.
“Es muy gratificante y satisfactorio ver que la biblioteca realmente es un sitio de reunión de la comunidad, oír los comentarios de los usuarios de Patio Bonito, del vecindario o los otros conjuntos residenciales que hay en la zona. Entender que visitan, usan y gozan de las instalaciones y que este edificio se ha vuelto un sitio de reunión. También es muy importante desde el punto de vista de planeación urbanística, desde un momento que este lugar era una planta industrial abandonada, en la mitad de una zona de crecimiento de la ciudad, hoy encontramos una ciudad relativamente conformada con sus parques, zonas humedales, avenidas, etc. Estamos ante una demostración de que el crecimiento de las ciudades puede ser organizado y beneficioso para la comunidad”, expresó Bermúdez.
Por su parte, la llegada de otros espacios para la formación de nuevos profesionales en el sector es posible gracias a la Universidad Uniagustiniana que fue construida en la zona de Patio Bonito precisamente para satisfacer la demanda de formación de la comunidad.
Según Fabio Vinasco, director de la facultad de arquitectura de la Universidad Uniagustiniana la zona del Tintal ha venido creciendo considerablemente, ''hoy es un centro de desarrollo para la comunidad, y además cumple un rol muy importante en la sociedad: satisfacer la necesidad de espacios para el encuentro de la comunidad, así como de formación de los habitantes de la zona, que anteriormente debían desplazarse al centro de la ciudad para consultar sus tareas y realizar investigaciones.”
Ahora es posible que los estudiantes universitarios de la localidad puedan hacer sus consultas bibliográficas en la misma zona gracias a la Biblioteca Pública Manuel Zapata Olivella – El Tintal. El reto del futuro de las bibliotecas serán las nuevas estrategias para la asociación y facilitar un mayor acceso a las nuevas tecnologías. “Pasamos de la Transformación de la basura y la lectura, y se viene muy pronto un nuevo propósito de construir las nuevas formas de relación y de conocimiento para el siglo venidero”, concluyó Vinasco.