Akira Kurosawa nació un 23 de marzo de 1910 en la ciudad de Shinagawa, Tokio; y fue uno de los creadores de cine más exitosos del siglo XX. Creció como el hijo número siete en una numerosa familia humilde y trabajadora; su madre era la cabeza del hogar y su padre el de un instituto del ejército japonés. Además descendiente de una línea antigua de samuráis. 

Una de las personas que marcaría su vida fue su hermano mayor Heigo, a quien describió como una persona inteligente, fuerte e inspiradora y que falleció en el gran terremoto de Kanto de 1923 a los 17 años. Para Akira este evento fue fundamental, pues, perder a su hermano le hizo sentir que el modo de vencer sus miedos era enfrentarse a ellos.

A sus 17 años, gracias a un profesor que descubrió su talento en la artes visuales y como pintor artístico, comenzó su carrera en el cine participando como narrador de películas mudas en algunos cines de Tokio. Siempre tuvo gran admiración por la cultura occidental siendo inspiración en muchos de sus largometrajes.

Kurosawa era famoso por ser perfeccionista, extravagante y exigente. Sus películas están enmarcadas en muchos periodos históricos importantes y casi siempre contaba historias de los antiguos samuráis del siglo XVI Y XVII.  Algunos de sus primeros lanzamientos de cine fueron Waga Seishum ni kuinashi (No añoro mi juventud, 1946),  donde se cuenta la historia de una mujer de de un disidente izquierdista, Subarashiki nichiyobi (Un domingo maravilloso, 1947) en la que Kurosawa expone los conflictos de una familia.

Posteriormente vendrían las grandes óperas primas más recordadas por el público y que le hicieron merecedor del apodo ‘’el shakespeare contemporáneo’’ y de una serie de reconocimientos como el Premio Óscar. Sus películas más recordadas son Rashomon (1950), Los siete samuráis (1954), Derzu Uzala: el cazador (1975) y Caos (1985).

Un 6 de septiembre de 1998 falleció este gran director en Tokio. Alcanzó a rodar y dirigir un aproximado de 30 películas que marcaron un hito en el cine japonés, filmes que mundialmente son catalogados como fundamentales en la historia del cine. 

En BibloRed contamos con gran variedad de las películas de Akira Kurosawa, por ello aquí te dejamos cuatro películas recomendadas de este gran director y un recurso literario para que ahondes más en la vida, obra y cine. Consúltalo dando clic en el recurso o aquí en el catálogo de la Red:

Kurosawa 101, Jaime Barrera 

Es el libro predilecto para que los lectores y lectoras estudien y valoren en toda su dimensión el origen y la identidad que impulsan al artista, y el análisis cinematográfico, que estudia e interroga estéticamente las películas sugeridas de estas particulares coordenadas. 

Película Barba Roja

El joven doctor Yasuoto regresa a su pueblo después de estudiar en Nagasaki, pero, en cuanto llega, sufre una gran desilusión: en lugar de ser nombrado médico del shogun lo envían a una clínica que cuenta con muy pocos recursos y está dirigida por un médico apodado "Barbarroja".

Película Dersu Uzala: el cazador

El guión de esta película está basado en las memorias del capitán Vladimir Arseniev. inicia cuando él y su destacamento tienen que realizar unas prospecciones geológicas en los bosques de la taiga siberiana. La inmensidad del territorio y la dureza del clima hacen que se extravíe. Condenado a vagar por una tierra salvaje, Vladimir conoce a Dersu Uzala, un cazador nómada que conoce el territorio como la palma de su mano y sabe cómo afrontar las inclemencias del tiempo.

Película El idiota

Esta película es una adaptación de la novela homónima de Dostoievski. Nuestro protagonista es Kameda, condenado a muerte por crímenes de guerra, en el último momento se salva de ser fusilado. La conmoción le provoca durante cierto tiempo fuertes ataques epilépticos; pero, al mismo tiempo, también se produce en él una profunda transformación, que algunos llaman "idiotez", pero que no es más que sencillez, bondad y una gran capacidad de amar. 

Película Rashomon

Japón, siglo XII. En Kioto, bajo las puertas del derruido templo de Rashomon, se guarecen de la torrencial lluvia un leñador, un sacerdote budista y un peregrino. Los tres discuten sobre el juicio a un bandido, acusado de haber dado muerte a un señor feudal y violado a su esposa. Los detalles del crimen son narrados desde el punto de vista del bandido, de la mujer, del señor feudal y del leñador, único testigo de los hechos.