Conoce aquí qué es el ‘Plan Cultura para la Libertad’
Como parte del compromiso de humanización del sistema penitenciario y carcelario, el Gobierno nacional, a través de los ministerios de Justicia y del Derecho y de Cultura, puso en marcha el ‘Plan de Cultura para la Libertad’, una estrategia que permitirá convertir las bibliotecas de los establecimientos penitenciarios en un escenario de resocialización e integración social.
Esta iniciativa que lidera el Ministerio de Justicia y del Derecho y el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC), con el apoyo del Ministerio de Cultura, nace a partir del referente implementado por las secretarías de Cultura, Recreación y Deporte, y de Seguridad, Convivencia y Justicia de Bogotá en la Biblioteca Carcel Distrital. Este plan piloto propone procesos bibliotecarios que promuevan lectura, la cultura y la educación en los establecimientos penitenciarios y carcelarios ‘La Modelo’ y ‘El Buen Pastor’.
En el lanzamiento de la estrategia en el Centro Penitenciario de Mediana Seguridad de Mujeres ‘El Buen Pastor’, jóvenes y personas privadas de la libertad compartieron con la ministra de Cultura, Patricia Ariza; el ministro de Justicia y del Derecho, Néstor Iván Osuna Patiño, y Rafael Tamayo, director de Lectura y Bibliotecas de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte y BibloRed, y desarrollaron actividades en donde se destacó la importancia de que les sea garantizado su derecho a la educación, y haya avances en el fortalecimiento del proceso de preparación para la libertad.
Para el ministro de Justicia “conectar los centros penitenciarios a la Red Pública de Bibliotecas va a permitir que estas (las bibliotecas) no sean solamente depósitos de libros para prestar, sino que allí en esos espacios se puedan realizar talleres de literatura y conversatorios”.
El ministro se declaró a la expectativa de los alcances que pueda tener en el sistema penitenciario el Plan de Cultura para la Libertad. “Estamos convencidos de que lograr unas mejores condiciones de vida para las personas privadas de la libertad nos permitirá ser una sociedad más decente”.
Señaló, además, que las personas privadas de la libertad anhelan el acceso a la lectura, la cultura, a la redención y a la búsqueda de segundas oportunidades. “El trabajo, la educación y las posibilidades de liberación mediante la cultura son necesidades que se siente en todos los centros penitenciarios del país”.
Por su parte, la ministra de Cultura, Patricia Ariza, dijo que “aunque las mujeres de este centro penitenciario hubiesen cometido un error, la vida no es un error. Por eso trabajaremos con las y los artistas, nos prepararemos en escrituras creativas y construiremos junto a las personas privadas de la libertad sus historias de redención y resocialización”.
La ministra también destacó el papel de la lectura, como un oasis en medio de la reclusión, y se comprometió a llevar una brigada cultural a El Buen Pastor donde no solo sobresalgan las manifestaciones artísticas sino también la conversación como un eje de liberación. Esta cartera también buscará donaciones para nutrir los recursos de las bibliotecas de los centros penitenciarios.
En el marco del Piloto de Cultura para la Libertad, BibloRed ha realizado tres sesiones de mediación de lectura –tanto en la cárcel Modelo como en el Buen Pastor- diseñadas e implementadas por mediadores de la Biblioteca de la Cárcel Distrital. También se ha realizado un intercambio de experiencias bibliotecarias entre los bibliotecarios privados de la libertad y los mediadores de BibloRed con el fin de fortalecer los procesos de más bibliotecas de los centros de reclusión a nivel distrital.
“Este tipo de programas garantizan el derecho a la cultura y a la educación de la población privada de la libertad, cumpliendo con la misión de la biblioteca pública: ser universal, gratuita y de acceso para todos. Desde el Distrito, decimos leer para la vida convencidos de que la lectura es capaz de alimentar la esencia de nuestro existir ciudadano”, mencionó Rafael Tamayo, director de Lectura y Bibliotecas de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte y BibloRed.