Cine en casa: la leyenda del indio
El cine, una industria de invenciones culturales, ha representado al indio, según el modelo de Hollywood, como el enemigo de una civilización simbolizada en los westerns por los hijos armados de los colonizadores que en el siglo XIX despojaron de sus tierras a los semínolas, los cheroquis, los crics, los choctas, los sauk y los fox, haciendo de Estados Unidos un país hipotecado por la raza blanca.
“No necesitamos la verdad: tenemos la leyenda”, se afirma en Inconvenient Indian, el documental de la realizadora canadiense Michelle Latimer, que no admite las ideas preconcebidas y enjuicia la tradición narrativa forjada en la pantalla.
“La idea del indio es más importante que la realidad del indio. Nadie quiere al indio, sino a la idea, porque la idea no es amenazante”, se afirma en el documental de Latimer.
Una idea, una leyenda, una visión que en América ha cifrado los prejuicios y la convivencia con un mundo de percepciones míticas como nos revela Apaporis (Antonio Dorado, 2012); amenazado según el relato de Nuestra voz de tierra, memoria y futuro (Marta Rodríguez/Jorge Silva, 1974-1980); exótico a la manera de una tarjeta postal del trópico (Kapax del Amazonas, Miguel Ángel “El Indio” Rincón, 1982), pero siempre interesado por los misterios de la vida (La eterna noche de las doce lunas, Priscila Padilla, 2013).