Música de agua
Cuando Nicolás Emilio “Nicoyembe” Rodríguez escucha el sonido de la marimba siente una alegría inmensa, una invitación a hacer locuras. Nicoyembe es músico profesional, nació en Quibdó, en el barrio César Conto, cuna de grandes artistas como Alexis Lozano, Nino Caicedo y muchos otros chocoanos que se han dedicado a la música en Colombia.
Hijo de un clarinetista folclórico, parte de la banda de San Francisco de Asís, y una bailarina empírica, Nicoyembe creció rodeado de música. Sus primeros instrumentos fueron ollas, tapas, cucharas o cualquier cosa que pudiera utilizar para combinar sonidos.
Actualmente representa la música típica del Pacífico, su tierra, y la de la costa Caribe, de cual aprendió gracias a maestras como Delia Zapata Olivella, Totó la Momposina y Leonor González Mina, la Negra Grande de Colombia. Después de una vida de carrera acompañando a grandes de la música folclórica colombiana por todo el mundo, él decidió tener su propio grupo y mostrar, a su manera, los ritmos típicos de las costas.
Nicoyembe será parte de la programación de diciembre de BibloRed que celebra las manifestaciones nacionales de Patrimonio Cultural Inmaterial avaladas por la UNESCO y reconoce las manifestaciones patrimoniales del distrito que ayudan a construir la identidad de Bogotá.
Conversamos con él sobre la marimba, la música de río y mar, y los cantos típicos del Pacífico sur.
¿Cómo llegó la marimba a tu vida?
Bueno, en el Chocó no hay mucha vivencia de la Marimba. El Chocó, al ser pacífico norte, maneja más enfáticamente la chirimía, que tiene una conformación de redoblante, bombo, clarinete, bombardino y platillos. Yo conozco la marimba a raíz de mi incursión en una Fundación llamada Colombia Negra. Con ellos viajé al Ecuador a festivales de marimba y música tradicional del Pacífico sur, ahí me incliné a tocar los tambores del sur: cununos, bombos, los guasá y la marimba. Después empecé a hacer conciertos didácticos del Pacífico sur donde cantaba las canciones tradicionales paganas, es decir, de rumba o de baile, y las religiosas o místicas, las que se cantan en épocas decembrinas, en el entierro de un niño, la muerte de un adolescente o un adulto.
No sé si muchos saben, pero la marimba entró a Colombia por Centroamérica, de África entró a nuestro país por Centroamérica: Honduras, San Salvador. Tan así que en esas regiones es interpretada por indígenas o pobladores de ascendencia indígena. Acá en el pacífico lo hacemos los negros, los raizales, esclavos que nos liberamos, o se liberaron y hallaron en la marimba su instrumento principal, porque era a lo que tenían más acceso. Simplemente cortaban la palma, la chonta, y empezaban a fabricar sus propias marimbas de una manera empírica, basados en la observación.
¿Qué hace especial a la marimba?
La marimba tiene un sonido muy característico, un sonido natural y es meritorio reconocer que nuestros fabricantes o pobladores de la región lograran hacer marimbas afinadas de acuerdo a las voces de las cantadoras sin tener conocimientos técnicos. Ahora se hacen marimbas atemperadas, es decir, adelgazarlas para darles la forma, el ancho y el largo ideal para ciertas tonalidades. Generalmente las marimbas típicas son diatonales, y no ciento por ciento afinadas, las de ahora sí las hacen afinadas.
¿Cómo se hace una marimba?
Se corta la palma de chonta, es chonta porque tiene unas espinas, unas púas. Con un machete le quitan las espinas, después de eso se abre la palma por toda la mitad y le sacan el corazón, ahí queda la corteza, la parte de encima. A eso se le da un grosor y dependiendo del tono que uno esté buscando le da la dimensión. Generalmente son 17 o 18 teclas, empieza con los tonos más graves.. Entre más bajo el tono, más corta la tecla. Se acorta, se acorta, se acorta hasta llegar al tono que logren llegar los cantadores. Es como un piano, de hecho, lo llaman el piano de la selva.
Las palmas tienen un fruto que va metido dentro de un forro, como una mochila, una mochila natural, eso lo llaman cabecinegro o guadana, algo así. Es una bolsa que parece un tejido, una malla. Anteriormente cogían las marimbas en las extremidades de la base y le ponían esa malla natural para que la tecla descansara al goleparla con los mazos o golpeadores. También lo hacían de tela, con trapo viejo, amarraban el palo con un hilo y colocaban las teclas para poderlas golpear, que rebotaran y produjeran el sonido, ahora lo hacen con cauchos de 3 o 5 mm de grosor, la tecla rebota y produce un sonido más limpio, más nítido.
Los golpeadores son sencillamente dos palitos, no hay una media estándar, hechos con caucho natural que se saca de un árbol. Le pegan unos machetazos y va escurriendo un líquido, ese líquido eco es el caucho. Eso lo cogen, lo estiran y empiezan a envolver la cabeza de ese palo hasta darle una forma redonda, así se hacen los golpeadores.
¿Cuál es el tema principal de los cantos que acompañan a la marimba?
Los cantos principales del Pacífico sur son composiciones de agua porque las regiones del pacífico sur están a la orilla del río y a la orilla del mar. La temática de la mayoría de las canciones son de las vivencias de la selva, la tradición cotidiana que vive un poblador de Guapi o de Timbiquí en la quebrada, al pie del río, que viven de la pesca, la extracción de ciertos productos de los manglares. Todo esto en conjunto es lo que les sirve de inspiración para hacer sus propias composiciones, casi todas enfocadas en la naturaleza, son pocas las canciones románticas del Pacífico. Siempre son cotidianas, de la selva, del canto del pájaro, de la navegación en la canoa, en el bote, en la champa. Las canciones están enfocadas en lo que somos y hacemos, por eso las cantadoras difunden y preservan la cultura, porque es nuestra.
¿Por qué es importante que el mundo preserve los cantos y la marimba?
Es importante primero para nuestro territorio, porque hasta ahora casi que a la fuerza nos estamos metiendo con la marimba y los cantos tradicionales del Pacífico después de ciertos músicos precursores, tenemos muchos músicos tradicionales que no tuvieron acceso a grabación como otros. Ahora hay muchos jóvenes enfocados en aprender a tocar marimba, pero de otras generaciones tenemos a Gualajo, uno de los más grandes marimberos que ha tenido el Pacífico, y a una familia de apellido Torres, que cantaban, fabricaban y tocaban la marimba.
El que empezó realmente a dar a conocer nuestras marimbas en el país fue Hugo Candelario del Grupo Bahía. Él, por intermedio de sus primeras grabaciones, dio a conocer a la marimba discográficamente, entonces la gente empezó a sentir ese sonido típico, mezclado con otros instrumentos de una manera comercial. Esa fue la arrancada, hoy hay muchos grupos.
¿Qué sientes cuando escuchas la marimba?
Pues, qué te dijera yo, es un alegría tan inmensa que me invita a querer hacer cosas, locuras. La tradición nos marca de muchas maneras, si queremos que eso no se acabe debemos conservar y exponer esa parte raizal para que no se pierda de nuestra cultura.
*Si quieres hacer parte de la programación de Patrimonio tendremos conversatorios, conciertos y un ejercicio de bibliotecas humanas en el que podrás dialogar con los portadores de manifestaciones nacionales y distritales. Conoce aquí las actividades que tendremos durante el 12, 13 y 14 de diciembre.